El dirigente sindical Hugo Moyano se atrincheró a la presidencia de Independiente posponiendo las elecciones que debían haberse concretado en diciembre del 2021 y finalmente pasó lo inevitable, lo sacaron a la fuerza.
Los hinchas del rojo indignados por la mala situación del club decidieron concentrarse afuera del edificio donde él junto otros dirigentes mantenían una reunión. Entre cánticos e insultos que pedían 'que se vayan todos' (muy argentino todo) Moyano debió retirarse con custodia. En menos de 24 horas comunicó que llamaría a elecciones en un plazo de dos a tres meses.
Como era de esperarse Moyano responsabilizó de los hechos de violencia a la oposición. "Doman, Ritondo, Arietto, Bullrich, Grindetti. Quieren ser dueños de Independiente e impulsaron la violencia de ayer", sostuvo el líder de Camioneros.
"Quedó en evidencia, fue poco genuino. La barra no maneja más al club desde que llegamos nosotros", destacó en su discurso. A su vez, negó que el club tenga deudas, "es mentira el club está en orden".
Antes de irse por la puerta de atrás, Moyano también culpó al barrabrava Bebote Álvarez, "Bebote es guapo desde abajo de la cama,
estaba la gente de él".